sábado, 20 de diciembre de 2008

Empresario individual

En el artículo publicado ayer en mi blog os decía, que interesaba conocer las distintas formas Jurídicas dentro del marco legal, para poner en marcha una empresa, así se podía uno constituir en:

Empresario individual, Comunidad de Bienes y Sociedad Civil, Sociedad Mercantil o Sociedad Cooperativa.

Entendiendo la empresa, como una unión de capital y trabajo para realizar una actividad de carácter económico y al empresario como el encargado de coordinar los elementos que forman la empresa para conseguir sus fines.

Así, el empresario puede ser individual o social, será empresario individual cuando es una Persona Física y será empresario social cuando es un Persona Jurídica.

Hoy escribiré algo del Empresario individual, quizás en principio sea la formula menos costosa para arrancar un pequeño negocio, tiene la ventaja de necesitar menos trámites y el capital depende de la voluntad del empresario, pero tiene sus inconvenientes, dado que, el empresario individual responde con todos sus bienes de las deudas contraídas frente a terceros.

El patrimonio mercantil y civil del empresario individual se confunden, tributando por los beneficios obtenidos en el desarrollo de su actividad empresarial a través del IRPF, aunque para determinadas actividades, puede acogerse a un régimen fiscal con menores obligaciones contables y registrales.


Para ser empresario individual, el individuo tiene que reunir, tanto los requisitos establecidos en el Código Civil, como en el Código de Comercio, es decir, el empresario individual, será aquella persona física que disponiendo de capacidad legal, ejerza de forma habitual y en nombre propio un actividad comercial, industrial o profesional.


Antes de iniciar su actividad deberá presentar la declaración de alta censal, tendrá obligación de darse de alta en el Régimen de Autónomos de la Seguridad Social.

También estará sujeto al impuesto sobre el Valor Añadido, pudiendo acogerse según el tipo de actividad, al Régimen simplificado del IVA, o al régimen especial de Recargo de Equivalencia.

Y ahora como soy mi propio jefe, aquí me planto y me voy a disfrutar de la preciosa iluminación de La Gran Vía y La Plaza de España, no sin antes mandaros un cálido abrazo desde el corazón de Madrid.

Carmen Marcos Núñez.

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