domingo, 9 de marzo de 2008

Matrimonio y pensión de viudedad



En el artículo que publiqué en mi blog en fecha 2 de enero sobre "la pensión de viudedad en 2008" un anónimo puso su comentario que me motiva a escribir el artículo de hoy en el que quiero deciros como quedó para los casados la citada pensión.


Todos conocéis, y si no os lo digo, que antes, el requisito para tener derecho a la pensión de viudedad, era "ser o haber sido cónyuge", pero amigos, tras la reforma de la Ley, de estar casado si no tienes hijos en común, tendrá que haber transcurrido un año desde la celebración del matrimonio hasta el fallecimiento del otro, para que puedas tener ese derecho.

En resumen, es un requisito que la Ley pide ahora a los casados para que tengan el derecho a la pensión de viudedad, que lleven un año casados si no tiene hijos, porque de tenerlos no existe plazo.

Estoy totalmente de acuerdo con el comentario anónimo y añado el mio:
"Me maravilla ver como nuestros gestores sociales, agudizan el ingenio y con que habilidad y de forma tan sutil piensan la formula para administrar y distribuir los recursos".

Pero lo más extraordinario es ver que la información llega al ciudadano tan distorsionada que solo cuando existe el problema y fallece la pareja o cónyuge, el que tiene el problema real se da cuenta que eso es lo que hay.

Carmen Marcos Nuñez

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Claro, la información llega al ciudadano distorsionada y suponiendo que llegue, pero cuando no interesa ni se comenta y quedará siempre en segundo plano cuanto menos salga a la luz mejor. Son muy cucos.
Siempre tendremos personas como usted para abrirnos los ojos.
Salud.

Anónimo dijo...

Me acaba de llegar la carta de la pensión temporal, solo llevaba casada 2 meses, aunque presente una convivencia /padrón/ de 12 años, les ha dado igual.

Estudio Jurídico Marcos dijo...

Claro, es que tendrías que llevar casada un año o tener hijos en común.

Un saludo

Carmen Marcos

Anónimo dijo...

llevaba 12 años conviviendo con el que yo llamo mi marido tubimos tres hijos en comun uno fallecio pero tenemos los demas. El fallecio en el año 1995 y me negaron la pension de viuda por no estar casados aunque si me dieron la de orfandaz.Con la nueva ley podria pedirla? gracias un saludo

Estudio Jurídico Marcos dijo...

Si cumples el resto de requisitos, entiendo que al tener hijos si podrías pedirla, pero tendrás que hacerlo dentro de este año 2008 y de concedertela tendría efectos económicos desde enero de 2007.

Pero recuerda que además tendrás que cumplir con el resto de requisitos que establece la ley,
por ejemplo:
No hallarse impedidos para contraer matrimonio. No tener vinculo matrimonial con otra persona, ni estar inscritos como pareja de hecho con otra persona, etc....
Nada pierdes con solicitarla,
Suerte...

Carmen Marcos

Anónimo dijo...

me casé en el 79, siendo estudiante universitaria. Abandoné mis estudios con ánimo de retomarlos más adelante y tuvimos dos hijos,mientras yo me dedicaba al 100% a la familia (la nuestra, la mía y la de él), sin abandonar mis aspiraciones-aficiones intelectuales, y mi apoyo al que para mí sería mi compañero hasta la muerte, incluyendo hacerle de "secretaria personal" para que él prosperase profesionalmente en sus dos quehaceres laborales (es funcionario por las mañanas y tiene otra ocupación bien remunerada por las tardes). Jamás se me pasó por la cabeza lo que luego sucedió, tras más de 20 años de matrimonio: un día mi marido decidió "cambiar de vida" y marcharse con otra mujer (luego supe que más de una). Después de presentarme un convenio regulador de divorcio (yo quise divorciarme) elaborado por un amigo suyo, en el que se me concedía pensión compensatoria por 4 años y lo que la ley marca para los hijos por alimentos, además de hacerme cargo de un crédito personal, sin casa y sin ninguna propiedad, que el coche se lo quedó él, traumatizada y enferma, con una hija universitaria y el otro estudiando primaria... lo firmé ante las amenazas de que ir a juicio sería mucho peor para mí y si no, pues lo que él quisiera... que tenía que vivir "su vida" y no podía por menos que hacer toda clase de gastos para ello, así que a nosotros... lo que él decidiera, y si era por las malas, me atuviera a las consecuencias. Por un lado decía que se sentía "responsable" de mí y nuestros hijos. Por otro, que todo era de él, que era el que ganaba, y que yo me buscase la vida. En el estado de shock en que me encontraba le creí cuando me dijo que "pusieran lo que pusieran los papeles, él siempre estaría ahí, y si se moría, me quedaba la viudedad de más de 20 años". Firmé lo que él quiso, más que nada por acabar de una vez, pesaba 20 quilos menos y estaba hundida... pero tenía dos hijos que atender y unos padres enfermos que en pocos meses se murieron los dos. Además, como yo le quería, siempre le había querido y funcionó el síndrome de Estocolmo, avalé para él un crédito pocos días antes de firmar el divorcio, para sus gastos extra, dijo, y para atender a nuestras pensiones, que si no, no podría... Todo esto sucedió hace siete años, de los cuales pasé cinco con poco más de seiscientos euros para tres personas y pagando un alquiler y las cuotas del crédito "mío", con más de cuarenta años y buscando trabajo a la desesperada, mientras daba clases particulares. Por cierto,en cuanto pasaron los cuatro años dejó de pagar la compensatoria(que pocas veces ingresó con regularidad) aunque yo no tenía nada. El crédito que le avalé me lo reclamó a mí el juzgado porque él no le hizo frente, mas como yo no podía, al final tuvo que pagarlo, no sin toda clase de reproches a los muchos gastos que le ocasionábamos nosotros, esa rémora que, según él, no "había dado un palo al agua en su vida". Hace dos años que conseguí trabajo en una oficina de la administración, tras pasar los exámenes de una oposición, pero sin plaza... soy una interina más y en cualquier momento me quedo en el paro. He pasado los cincuenta. Con todo, mi hija mayor ha terminado su carrera y el pequeño la comenzará en un año. Trabajo muchísimo y hago todas las horas extraordinarias que puedo porque cada vez tengo más miedo a lo que pueda venir. En todo este tiempo he sido yo quien ha vivido con los hijos y quien les ha ayudado a vivir. Se pueden contar con los dedos de las manos las veces que su padre les ha visto o ha comido con ellos, y no hablemos de cuestiones emocionales o responsabilidades derivadas de la obligación de educar y ser progenitor responsable, sobre todo el las etapas de la adolescencia: todo y siempre yo.
Procuro vivir sólo el presente, pero es inevitable ¿o no? preocuparse por lo que me pueda esperar, dado el panorama socioeconómico que atravesamos, mi edad y que, dentro de poco, mis hijos volarán... ¡Y ojalá puedan!
Ahora me entero de que tampoco tendré derecho a viudedad por esos veintipico de años que fui ¿estúpida y crédula?. Si yo me muero no dejaré dinero ni propiedades a mis hijos, pero sí el convencimiento de que hice todo lo que pude por ellos. Sólo yo se lo que me costó volver a ser persona y enfrentarme al mundo con los pies en la tierra y sin ayuda de medicamentos. Lo conseguí, y a veces no sé cómo. Si se muere él y yo me quedo sin trabajo y no me muero, mis hijos, estén en la situación que estén, tendrán que hacerse cargo de mí porque su padre, un buen día, decidió sobre las vidas de todos ¿qué grado de responsabilidad tengo yo en todo esto? ¿no debí, verdad, creer en el que era único hombre de mi vida, mi compañero, y al que un buen día se le cruzó un cable y dejó de ser bueno para ser un hijoputa de doble moral y convertirse en un egoísta y un inconsciente? ¿puedo, ahora, hacer algo para remediar mi malhacer? Sirva mi testimonio para otras-otros en situaciones similares.

Estudio Jurídico Marcos dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo y añadir lo que ya escribí en algún lugar................

No siempre la pensión compesatoria le queda a quien realmente el divorcio o la separación le produce desequilibrio económico y por tanto ahora pierde también el derecho a la pensión de viudedad.........................

Un derecho adquirido, en parte, gracias a las cotizaciones a la S.S., aportaciones hechas durante años de matrimonio, en detrimento de los recursos mensuales, que de no haber cotizado recibiría la familia contribuyendo a un mejor bienestar, o incluso a una mayor porción de bienes a la hora de liquidar los gananciales........

Conozco casos como el tuyo, de mujeres mayores que dedicaron su vida en cuerpo y alma al marido y a los hijos,su futuro, incierto, con edad, con achaques, sin recursos y a merced de que los hijos les echen una mano........

Esas mujeres en su día igual que tu, bien por temor, desconocimiento, falta de recursos para un buen asesoramiento o por terminar cuanto antes con una pesadilla que no entendian, firmaron lo que les pusieron delante, ahora aunque el ex fallezca no les queda ni pensión de viudedad...........

En fin, animo y a continuar luchando, no queda otra..........

Carmen Marcos